Neuroplasticidad: Controlamos nuestro propio destino

Todos hemos oído la palabra neuroplasticidad pero ¿qué significa realmente? Permitidme compartir con vosotros esta información interesante al respecto:

El término neuroplasticidad viene de las palabras neurona y plástico:

  - Neurona, se refiere a las células nerviosas en el cerebro. Cada célula neuronal individual  se compone de un axón, dendritas, y está vinculada a otra por un pequeño espacio llamado sinapsis.

- Plástico, significa moldear, esculpir o modificar.

La neuroplasticidad se refiere a la capacidad que el cerebro tiene para reorganizarse mediante la creación de nuevas conexiones neuronales para adaptarse, el cerebro está en un constante cambio y evolución.

La neuroplasticidad se define como el moldeo de los circuitos del cerebro por las nuevas experiencias mediante la construcción de los nuevos patrones de cableado. La plasticidad en el cerebro se encuentra en su pico máximo de crecimiento en los primeros años de vida. La comunicación entre las células neuronales cambia en respuesta a la actividad cerebral generada por las experiencias nuevas. 

Úsalo o lo piérdelo!

Se dice acerca de la neuroplasticidad que las neuronas que se activan juntas se conectan y las neuronas que activan por separado se conectan por separado. Esto significa que cuando las neuronas se activan al mismo tiempo como respuesta a un evento se asocian unas con otras y las conexiones se hacen más fuertes. Es por eso que la gente habla de las vías neurológicas que se establecen cuando se incrementa la práctica; cuanto más practiques, más fuertes se convierten esas vías. Por supuesto, a la inversa también sucede: si no se utilizan esas vías, el espacio será utilizado por otras que necesitan ese espacio para crecer. Así que Úsalas o piérdelas!

El enfoque y la neuroplasticidad

En el budismo tibetano el concepto de neuroplasticidad se llama “le-su-rung-wa” que significa flexibilidad (el cerebro puede cambiar basado en la experiencia repetida) y se ha utilizado durante muchos años sin que la ciencia occidental lo haya reconocido.

Se han realizado estudios sobre la plasticidad durante la meditación y han demostrado que el cerebro puede cambiar basado en el entrenamiento mental. Si piensas y te enfocas en ser más compasivo, más positivo, con más recursos o más tranquilo, puedes lograrlo con esfuerzo, disciplina y entrenamiento. 

Desde un punto de vista educativo la demostración de que nuestros pensamientos afectan la neuroplasticidad abre el camino de la formación de nuestro cerebro en una forma positiva para cambiarlo y por lo tanto crear nuestra propia realidad y cómo los acontecimientos nos afectan. El enfoque es crítico ya que la capacidad de nuestro cerebro para procesar información es limitada; Cambiando nuestro enfoque creamos nuevos patrones neurológicos y el enfocarnos en algo hace más fuertes los vínculos neurológicos ya existentes.

Está comprobado que el pensamiento positivo libera dopamina que activa los circuitos de recompensa en el cerebro, que nos hace sentir bien. Cuanto más nos enfocamos en las cosas positivas, mejor nos sentimos. Podemos enseñar a nuestro cerebro a sentirse bien independientemente de lo que suceda en nuestra vida. Nuestros propios pensamientos pueden cambiar nuestro comportamiento y nuestras capacidades de aprendizaje. 

La Neurogénesis

Neurogénesis significa nacimiento de neuronas. Era un paradigma aceptado en todo el mundo que el cerebro humano que está constituido por aproximadamente 100 mil millones de neuronas era estático. Se creía que cada uno de nosotros había nacido con un número determinado de células neuronales y cuando una célula moría  ninguna podría crecer de nuevo. Este viejo modelo de la incapacidad de regenerar nuevas células nerviosas es incorrecto, hoy en día se ha demostrado que ciertas áreas del cerebro pueden generar nuevas células frescas. Esta nueva comprensión de la generación de células neurales es un descubrimiento muy importante. Otro concepto erróneo es que el cerebro tenía una incapacidad para crear nuevas conexiones neuronales. 



















Como enseñar a nuestro cerebro a conectar de manera positiva:

Hay varias maneras de enseñar a nuestro cerebro a pensar de manera positiva y crear nuevos caminos que conducen al pensamiento positivo y la felicidad:

1. Ejercicio: 
Está comprobado que el ejercicio ayuda a nuestro cerebro a mantenerse activo liberando neurotransmisores en nuestro cerebro que nos hacen sentir mejor, reforzando así el patrón de sentirnos bien.

2. Sueño:
Dormir es fundamental para nuestra salud cerebral. Tenemos que dormir y descansar con el fin de mantener nuestro cerebro en buen estado.

3. Nuevo aprendizaje:
Sé un aprendiz de por vida con el fin de mantener tu cerebro aprendiendo cosas nuevas, desarrollando el hábito de aprender a mantener el cerebro en buena forma. 

4. Manteneros socialmente conectados:
Como buenos mamíferos, la interacción social es fundamental para nuestras vidas ya que nos ayuda a entrenar nuestro cerebro y mantenerlo en constante aprendizaje, reaccionando a las nuevas experiencias.

5. “Mindfulness” Mente Plena/ Enfoque:
Atentamente debemos centrarnos en el mundo que nos rodea, como si estuviéramos viéndolo por primera vez. Disfruta de la naturaleza y la belleza de cada cosa única en el universo. 

6. Meditación:
La meditación  suele ser utilizada también en el entrenamiento de nuestro cerebro ya que tiene el poder de moldear y dar forma a nuestras mentes para instalar los cambios que queremos. La meditación nos trasmite paz interior y felicidad.

7. Nutrición:
Presta atención a cómo alimentas tu cuerpo. Comer correctamente es fundamental, recordemos que nuestro cuerpo y mente son uno solo.

Recuerda: Entrenando tu cerebro podrás tener las vías positivas para el éxito y la felicidad más fuertes cada día. Tu eres el dueño de tu propio destino!